Radoslav pudo sostener a Marc Rosso

RADOSLAV protagonizó una victoria de alto nivel al imponerse en el Clásico “Gustavo Prado Heudebert” (G3), disputado sobre 2000 metros en la pista de césped del Hipódromo de Monterrico. Con la conducción serena y oportuna de Carlos Trujillo, el alazán se mantuvo cerca de los punteros para dominarlos en la recta opuesta y, tras tomar el comando, resistir con entereza el fuerte avance de Marc Rosso, que lo escoltó con todos los honores. Gran Charlie completó la trifecta, delante de Rey Mistiano, en un tiempo de 2.02.90.

El pupilo de Juan Suárez, presentado en inmejorables condiciones, defendió los colores del Stud Jet Set y fue criado en el Haras Rancho Fátima, cuna de grandes exponentes del turf peruano. La labor táctica de Trujillo fue decisiva, administrando con inteligencia las fuerzas del potrillo para sostener en la meta el exigente remate del escolta y ratificar su clase en una prueba que exigía fondo y determinación.

Con este éxito, RADOSLAV suma cuatro triunfos en seis presentaciones, consolidándose como el mejor potrillo de la generación sobre el césped. Su regularidad, solvencia y madurez lo posicionan como una carta firme para los compromisos mayores del cierre de temporada, donde su nombre suena con fuerza entre los candidatos al Clásico “Postín” (G2).

La llegada, cargada de emoción, tuvo un instante de incertidumbre cuando el jinete de Marc Rosso celebró en el disco, generando dudas entre el público. Sin embargo, la foto oficial despejó toda confusión, confirmando la victoria legítima de RADOSLAV, quien reafirmó con jerarquía su dominio en la pista verde de Monterrico.